Los cofrades como todos los católicos, tenemos en la Oración y la Eucaristía, nuestro principal alimento. Las Hermandades fomentan las celebraciones eucarísticas con sus cultos mensuales, los triduos, quinarios, funciones principales, incluso algunas organizan misas semanales. La Oración, dado su carácter más íntimo, es propiciada en menor medida, aunque no podemos olvidar que existe la posibilidad de su celebración colectiva. Ahora bien, cuando se reparten estampas y fotografías de los titulares, es un momento propicio para llamar a la oración, inluyendo, como se hace en algunas ocasiones, oraciones que inviten a la oración. También es cierto que a veces con la sola contemplación de alguna de nuestras imágenes o de los sagrados misterios que representamos, estamos llamando de una forma poderosa y elocuente a la práctica de la Oración.