Será un día para disfrutar de grandes cofradías. Los Salesianos estrenan la nueva hechura de sus hábitos que conservan los colores de los antiguos e incorporan capa para todos los penitentes. Los titulares de la Aurora partirán la Iglesia de San Miguel Bajo, donde se ha tenido que instalar un andamiaje especial para subsanar el estado de ruina de las techumbres del templo. Debido a esta circunstancia, el cortejo saldrá del Centro Cívico del Callejón del Gallo, gracias a la cooperación municipal. En principio lo iba a hacer desde el Monasterio de Santa Isabel la Real, pero se ha optado por esta solución para no interferir en la vida de las monjas.
Otras dos hermandades partirán también desde el Albayzín. Se trata de la Estrella que ha restaurado los varales de su palio y la Concha que nos ofrecerá la primera fase de la remodelación del paso de su Nazareno, según diseño de José Manuel Martínez con el asesoramiento de Manuel Amador. Se conservan los respiraderos debidos a los talleres bastetanos de los Hijos de Juan Fernández y en parte el canasto, que es donde más se va a intervenir. El tallista cordobés Manuel Aroz está desarrollando esta proyecto con la participación del imaginero Alfonso Castellano que ya ha realizado algunos de los elementos como los bustos de San Francisco y Santa Clara situados en las capillas delantera y trasera, respectivamente, del respiradero. Esta actuación se completa con obra de orfebrería y tal vez lo que más llame la atención sean los ángeles que se van a colocar en el paso. La Hermandad se ha planteado su terminación en cinco años, contando a partir del presente. El resultado final será en madera barnizada. Por el momento se han retirado todos los barnices anteriores.
Por último, justo al declinar esta jornada, será el turno para el Silencio, Cofradía que sigue figurando en el programa de este día, aunque en verdad pertenece al Viernes Santo. La procesión volverá a encerrarse por segundo año consecutivo en la Parroquia de San Pedro ante el estado de ruina de San Nicolás.