jueves, 25 de marzo de 2010

DETALLES DEL CONTRATO DEL ANTIGUOO PASO DEL VÍACRUCIS EN SU REVISTA ANUAL



La Cofradía del Víacrucis ha editado el número 11 de su revista anual en la que además de amplio despliegue gráfico en el que intervienen hasta once fotógrafos, se recoge un artículo firmado por el actual Hermano Mayor, el restaurador Francisco Marín, en el que da todos los detalles sobre el encargo del trono que en 1944 realizó Nicolás Prados López para Jesús de la Amargura. Fue el 17 de junio de 1945 cuando se adoptó el acuerdo de ejecutar esta obra de arte por parte de la Junta General de la Cofradía. Era Hermano Mayor Hermenegildo Romero Granados, quien el 22 de diciembre del año siguiente informaba de la contratación que se había hecho a Nicolás Prados para llevar a efecto la iniciativa. Con anterioridad se tomó también contacto con Francisco Romero, pero su proyecto no fue finalmente desarrollado. El precio que se convino con Prados López fue de 50.000 pesetas. El compromiso fue tenerlo concluido para la Semana Santa de 1947. Así sucedió y en marzo de aquel año se expuso al público en la Catedral. Era uno de los pasos más característicos de nuestra Semana Santa que hasta 1990 incluso disponía de trabajaderas exteriores. Ese año fue reformado con motivo del traslado de la Cofradía desde el templo metropolitano hasta San Juan de los Reyes. Aunque perdió los volúmenes y las proporciones originales, sin embargo ha sabido conservar el sabor de otras décadas y ofrece una estampa singular. En 1992 fue restaurado por Cecilio Reyes y en los últimos cursos están siendo enriquecido con unos respiraderos en terciopelo en los que trabajan el bordador Sebastián Marchante y el tallista Ángel Asenjo, autor de una serie de cartelas.