A las 10 de la mañana daba comienzo la solemne Eucaristía, previa a la procesión, en el interior de la Parroquia del Patrón de la ciudad de Granada. La misma estuvo repleta de hermanos de esta corporación y de vecinos del barrio que asistían ansiosos a los actos de este domingo sacramental, siendo la misa oficiada por el párroco de San Cecilio, D. Mario Camacho; quien mostró en todo momento su alegría por celebrar un año más el Corpus en el Realejo.
Una hora más tarde, empezó a discurrir el cortejo desde la iglesia hasta la Plaza del Cristo de los Favores, donde ya permanecía en el interior de la capilla de esta Hermandad el paso que portaba al Santísimo. Un cortejo que abría la cruz parroquial con ciriales y algunos hermanos que portaban cera roja. Tras ellos, las representaciones de María Auxiliadora de la Alhambra, Jesús Nazareno, Penas, Santa Cena, Humildad y la propia cofradía de los Favores; contando con el acompañamiento de la Presidenta de la AAVV del Realejo, Carmen Nestares, y los Hermanos Sacramentales de este año, Francisco Ruiz "El Braserito" y su mujer Ana Valderrama.
Tras ellos, el cuerpo litúrgico que antecedía el paso del Santísimo Corpus Christi portado por dos cuadrillas de costaleros de los Favores a las órdenes de su capataz general, Francisco Cordones.
Paso que se presentaba para la ocasión exornado con claveles y azucenas blancas, alternado con espigas y alumbrado por piezas de candelería con cera blanca. Además, el paso era acompañado por el párroco de San Cecilio y el palio de respeto; junto con la nota musical y eucarística que se encargaba de poner la Banda Filarmónica Misericordia Coronada.
Al paso de la custodia se pudieron observar dos altares que los jóvenes levantaron en honor del Santísimo, tal y como fue el del grupo joven de los Favores, instalado junto a la misma puerta de San Cecilio y el del grupo joven de la Seráfica Hermandad de Gloria de los Ángeles en la calle Molinos.
Una procesión que duró cerca de hora y media y que destacó por su emotividad en lugares tan especiales como la puerta de Santa Catalina de Siena, donde las monjitas recibieron a la corporación y al paso de la Custodia. Jornada sacramental por las calles del Realejo que puso el broche final de este Corpus 2010 en este barrio granadino.